hablando de reuniones

En una entrada del blog de Guffo me topé con muchas cosas ciertas en esas reuniones donde te reencuentras con excompañeros de escuela. Aunque siempre es grato saber que fue de la vida de con quienes compartiste tantas parrandas, tu primer crush, aquellos con quienes te desvelaste en trabajos en equipo y más, no dejan de haber esos momentos incómodos:

– Me enteré de que te casaste
– Sí, justo antes de que mi papá falleciera
– …

– No’mbre, me ofrecían 20,000 al mes, ya parece que iba a agarrar esa miseria
– …

– Con que eres médico ¿eh? ¿y cuándo vas a abrir tu consultorio?

– Ah, ¿tú eres la esposa de Clodomiro? ¿sabías que me estuvo tirando los perros en toda la prepa?

En fin y ejemplos hay muchos, pero lo que más me choca de estas reuniones es que no siempre te encuentras con verdaderos amigos y cual ley de Murphy siempre terminas platicando solo con quien menos querías toparte en la fiesta y que no para de hablar de cuan exitoso ha sido. Claro, comparado contigo.